noviembre 28, 2014

De mano en mano los libros

El corazón de nuestra Red de Bibliotecas Rurales es, sin lugar a dudas, el canje de libros. Se basa en el antiguo sistema del trueque de nuestros productos y trabajos del campo, pero aquí intercambiamos libros.
Cuando hay la Fiesta de Canje en nuestra central –como este 22 de noviembre–, los coordinadores llegan de sus comunidades trayendo cajas y bolsas enormes con libros. Estos se reciben y son sometidos a reparación, selección y –en estos últimos meses– también a una nueva clasificación y codificación.
Luego, los coordinadores buscan y eligen los nuevos libros que quieren llevar en esta ocasión a sus comunidades. Anotan estos nuevos libros en las hojas de canje para que nosotros, en la Oficina Central, los podamos luego registrar en el sistema de cómputo.
El canje se puede hacer en cualquier momento, pero nos da más alegría y ánimo cuando lo hacemos todos juntos.
Antes, todos los coordinadores se iban a nuestro almacén de libros y ahí –apretujados y con una iluminación deficiente– elegían los libros que se encontraban ordenados en los estantes. Muchos títulos, entonces, pasaban desapercibidos y nos cansábamos pronto por la estrechez del ambiente.
Por eso, hace algún tiempo, nuestro compañero Alfredo Mires propuso hacer del canje esta fiesta. Ahora, todos ayudan la noche anterior a pasar los libros desde nuestro almacén a la Sala Mayor de Bibliotecas, formando una larga cola como cuando pasamos ladrillos o tejas en minga para construir una casa. Luego ordenamos los libros en mesas según su temática y, al día siguiente, todos juntos revisamos los libros para llevar los que más nos gustan o se necesiten nuestras comunidades.
Al terminar, regresamos nuevamente todos los libros al almacén, otra vez en minga, con la ayuda de muchas, muchísimas manos.
Agradecemos a todos los que han hecho posible esta Fiesta del Canje de noviembre. Y agradecemos, sobre todo, a nuestro amigo Kepa Osoro, que no descansó hasta haber ingresado y registrado todos los libros canjeados. Nunca en la historia de Bibliotecas habíamos logrado terminar al final de una Asamblea con el registro.
Gracias a todos por semejante empeño y decisión.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es hermoso ver como los compañeros escogen felices los libros que deben llevar a los lectores de sus bibliotecas en las diferentes comunidades de Cajamarca. Sigan adelante con este digno trabajo que es un digno ejemplo para todos. Que Dios les bendiga.